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La palabra “perspectiva” se escucha y se lee con bastante frecuencia porque la vida se trata de perspectiva, ¿no es así? Todo lo que dejamos entrar en nuestras mentes tiene que pasar a través del lente de nuestra propia perspectiva. Si lo piensas, la perspectiva es nuestra libertad y nuestro cárcel al mismo tiempo. Tiene el poder de construirnos o destruirnos dependiendo de cómo trabajemos con ella.
¡Qué herramienta tan poderosa! Pero, ¿qué es la perspectiva, de todos modos? Cambridge Dictionary la define como “una forma particular de ver las cosas que depende de la experiencia y la personalidad de uno”. Entonces, si la perspectiva depende de la experiencia y la personalidad de cada individuo, la perspectiva de cada persona es obviamente muy única. No sé si a veces pienso demasiado las cosas, más de lo que debería, pero siento que esta pequeña palabra es más compleja de explicar de lo que puede parecer. Permítanme y les explico esto. Si nuestra perspectiva es cómo vemos las cosas en función de nuestras experiencias y personalidades, pero damos forma a nuestras personalidades y experiencias en función a la forma en que vemos las cosas, ¿no es eso confuso? 🤔
Creo que este enigma es similar a la discusión sobre quien vino primero, la gallina o el huevo. Mi intención aquí no es hacerte pensar demasiado en las raíces profundas de la perspectiva como una cualidad humana, sino mostrarte lo importante que es respetar las perspectivas de otras personas en la vida. Permiteme ser clara: no estoy diciendo que no debamos dar nuestra opinión si alguien tiene una perspectiva diferente. Pero debemos entender que incluso cuando pensamos que tenemos toda la razón sobre una situación en particular y la otra persona no lo ve como nosotros, eso significa que sus experiencias de vida y personalidad han dado forma a su perspectiva de una manera diferente.
La razón por la que estoy hablando de perspectiva hoy es un poco graciosa. Por lo general, tengo un tema en mente cuando estoy lista para escribir mis publicaciones, y a veces necesito investigar un poco antes de sentarme. Entonces, hace unos días tenía mi tema en mente y necesitaba hacerle una pregunta a mi ex esposo para juntar algunas ideas. Por algunas razones que puedo explicar en un post posterior, quería hablar de mis fracasos como esposa. Quería exponer algunas de las cosas que hice que causaron dolor o cualquier tipo de incomodidad emocional a mi ex esposo. Entonces, le envié el siguiente texto:
“¡Oye, respuesta honesta aquí, por favor! ¿Cuáles fueron mis mayores fracasos como esposa? Necesito comentarios honestos, para poder convertirme en un mejor ser humano”.
Su respuesta: “No hay nada malo que tú hayas hecho o yo haya hecho. Estábamos buscando algo diferente en un punto en particular. No creo que mi opinión importe porque solo soy yo. Cada persona es diferente y cada relación es diferente. Así que no hay ningún fracaso que realmente pueda describir”.
Leí su respuesta y me tomé un momento para pensar. Me sorprendió totalmente el hecho que todos tenemos formas tan diferentes de ver la vida y las situaciones, por lo que mencioné anteriormente que es importante respetar las perspectivas de los demás. A pesar de que ambos compartimos la misma experiencia de pareja casada, mi forma de ver nuestro divorcio es completamente diferente de su forma de verlo. Creo que ambos fallamos en algunos aspectos y esos fracasos crearon una ruptura que era imposible de arreglar, y él piensa que no fallamos; solo buscábamos cosas diferentes. Ves, la perspectiva es muy única.
¿Vale la pena imponer nuestro punto de vista cuando no estamos de acuerdo con la forma en que otras personas ven una situación en particular? ¡No lo sé! Esa es una decisión muy personal. Esa es la razón por la que comencé diciendo que la perspectiva es nuestra libertad como nuestra cárcel al mismo tiempo. Creo que si vivimos nuestras vidas tratando de imponer nuestras perspectivas a los demás, nunca seremos libres. Cada uno de nosotros experimentará las situaciones de manera diferente. Podemos encontrarnos con algunas personas que compartirán algunos de nuestros puntos de vista, y eso es genial, pero también es genial cuando tienen su propia forma única de ver el mundo.
Mi ex esposo me acaba de enseñar que las perspectivas son únicas, y que podemos lograr la libertad mental en el momento en que nos damos cuenta de este hecho. Estoy extremadamente agradecida de tener la capacidad de ver el mundo a través de la empatía, así que si bien puedo estar en desacuerdo con algunos puntos de vista, entiendo totalmente que esos puntos de vista provienen de vidas que están siendo caminadas por otros zapatos, y solo puedo respetar eso. También sé que mi perspectiva puede expandirse de vez en cuando cuando hablo con personas con diferentes puntos de vista, pero siempre tendrá mi propia huella.
La perspectiva lo es todo, mis amigos. Siempre tenemos la opción de ver cada situación que enfrentamos en la vida a través del lente que decidamos usar. Lo mejor de la perspectiva es que, como todo en esta hermosa vida, no es permanente. Siempre podemos redefinirla y remodelar nuestra propia perspectiva para que pueda servirnos mejor. Si nuestro punto de vista nos está causando algún tipo de dolor o incomodidad, podemos cambiarlo. ¡Esa es la belleza de ser humano!
Con amor,
Irene